Luego de culminar con éxito los cursos de Kreyol –idioma de Haití- y español respectivamente, acciones que benefician la integración de las comunidades migrantes impulsadas por el Centro de Estudios Migratorios e Interculturales del plantel.El próximo jueves 07 de septiembre a las 19:00 horas en el auditorio Monseñor Manuel Larraín de la Sede Central San Miguel de la Universidad Católica del Maule se llevará a cabo la ceremonia de certificación de los cursos de Kreyol para funcionarios de la Policía de Investigaciones (PDI) y de español para extranjeros, ambos coordinados desde el Centro de Estudios Migratorios e Interculturales (CEMIN) de la UCM.

Son un grupo de 31 efectivos policiales y 10 extranjeros provenientes de Haití, Rusia, Ucrania y Alemania, los que recibirán su certificado, quienes participaron activamente durante las 30 horas de clases, abandonando la tradicional forma frontal de entregar las materias –profesor al frente de la sala- desarrollando metodologías participativas en grupos reducidos para facilitar el aprendizaje.

Sobre la exigencia del curso de español para extranjeros, Milko Cepeda, académico UCM -que hoy celebra su segunda versión-, señaló que “Para certificarse se les exige asistencia y pruebas. Pudimos establecer progresos en los participantes. Además, realizamos una actividad cultural para favorecer la integración cultural. Junto a los aspectos formales incorporamos modismos para que enriquezcan su comunicación”.

Sobre la positiva experiencia de aprendizaje y acercamiento en beneficio de los migrantes, el comisario Gustavo Espinoza, jefe de extranjería de la PDI en Talca, indicó que “Teníamos un problema grave debido al conflicto idiomático, no entendíamos nada de lo que nos expresaba la comunidad haitiana y no podíamos prestarle un servicio de calidad según sus necesidades. Gracias a la iniciativa que tuvimos y la buena acogida por parte de la Universidad Católica del Maule logramos concretar este proyecto”.

En la segunda versión del curso de español participaron además dos rusos, un ucraniano y un alemán, extranjeros que representaron un desafío particularmente complejo para el grupo de docentes, ya que como explicó Milko, “Las lenguas de raíz Romance como el francés tienen algunas similitudes incluso de palabras con el español, pero el kreyole -lengua haitiana-, es distinto porque está mezclado con dialectos africanos que tienen sonidos que el español no. En el caso de los rusos, ingresaron al curso de español avanzado porque necesitaban adquirir competencias gramaticales. Es más difícil con las lenguas de origen Balcánico, porque por ejemplo el verbo ser no se usa en ruso, tienen sonidos que nosotros no y por eso la complejidad”.